Las habitaciones son amplias con colchones comodísimos y una limpieza muy buena. Las vistas de la ciudad son impresionantes, especialmente al atardecer, lo que crea una experiencia visual única desde el hotel.

La temperatura en la habitación no se puede regular, lo que puede resultar incómodo, o pasas calor con la calefacción fuerte o enfrías la habitación sin control. Además, el desayuno carece de variedad, con pocas opciones de frutas y quesos, lo que no es lo que uno espera de este tipo de establecimiento.

La estancia en el parador fue muy placentera. La habitación, una Standard Double Room, era espaciosa y muy cómoda, con unas vistas impresionantes de la ciudad, especialmente al atardecer. La limpieza fue impecable, los baños estaban cuidados y el mobiliario, aunque simple, cumplía su función. Gracias a que el parking es gratuito, no tuvimos problemas para dejar el coche. Sin embargo, el desayuno me pareció un poco elevado en precio y con poca variedad. echamos en falta opciones como frutos secos o avena. Además, aunque la atención en el desayuno fue buena, hubo momentos en los que faltaba personal. Un detalle a mejorar son las escaleras de la piscina, ya que me parecieron poco seguras. A pesar de estas cuestiones, el entorno era relajante y el diseño del hotel realmente llamativo. La ubicación está a unos 15 minutos del centro, lo que garantizaba tranquilidad, aunque un poco alejado de la zona más turística.

Las habitaciones son amplias y la cena fue decepcionante en calidad.

La piscina estaba muy bien cuidada y era un lugar tranquilo para relajarse.

Las escaleras de la piscina son bastante peligrosas, ya que están demasiado verticales y poco seguras.

El parador ofrece unas vistas espectaculares de la

ciudad y su catedral. Las instalaciones son muy amplias y cómodas, pero el desayuno pudo ser más variado. La limpieza de la habitación fue impecable y el personal amigable, aunque la conexión de internet se cortaba de vez en cuando.

La ubicación es maravillosa, a pasos del centro histórico y con vistas espectaculares. Las instalaciones son modernas y las habitaciones son amplias y muy cómodas. Además, el personal es muy amable y atento, lo que hace que la estancia sea aún más agradable.

El desayuno no estaba tan bien atendido como esperábamos, con momentos sin personal suficiente.

Vistas impresionantes a la catedral.

Directo al grano, sin tonterías

Las vistas son impresionantes, pero el servicio del restaurante puede ser inconsistente. Durante mi estancia, noté que la calidad del desayuno no cumplía con las expectativas. Además, el WiFi era poco fiable, lo que puede ser un inconveniente para quienes necesitan estar conectados.

Ubicación espectacular con vistas de la catedral, habitaciones amplias y un bonito jardín. Perfecto para disfrutar de una copa después de un día explorando la ciudad histórica.

El edificio parece más un bloque de hormigón que un encanto histórico, un poco anticlimático, ¿no?

una estancia agradable pero con áreas por mejorar

La piscina tiene vistas espectaculares y es un excelente lugar para relajarse. La habitación era amplia y limpia, con un mobiliario suficiente y cómodo. Además, el aparcamiento gratuito facilita mucho la estancia, especialmente en un lugar donde encontrar aparcamiento puede ser complicado.

El desayuno podría mejorar en variedad y presentación.

Los espacios son amplios y la vista hacia la ciudad es impresionante. Sin embargo, el desayuno dejó mucho que desear en cuanto a variedad, faltando opciones como frutas. La atención del personal fue amable, pero la piscina tiene escaleras un tanto peligrosas que necesitan atención. A pesar de estos detalles, la habitación era cómoda y estaba bien cuidada.

El parador ofrece vistas impresionantes de la catedral desde varias áreas, y el aparcamiento gratuito es muy amplio. La habitación era bastante espaciosa y la limpieza impecable. Además, hay un bonito jardín para relajarse.

Nada.

El parador tiene instalaciones muy atractivas y un diseño interior que crea un ambiente acogedor. Las amplias habitaciones son un gran plus, y la ubicación cerca del puente romano facilita el acceso a la ciudad. Sin embargo, el ruido en las áreas comunes puede ser molesto a ciertas horas.

Encantador lugar para disfrutar de la tranquilidad y relajarse en el jardín, y con el centro histórico a un corto paseo.